Qué mejor vuelta a las publicaciones de este blog que abrir con otra vuelta, en este caso la de una de la bandas de rock progresivo español con más éxito dentro y fuera de nuestras fronteras, y como ya hemos comentado en otras ocasiones, de las predilectas de quien os escribe, no en vano es la protagonista del penúltimo episodio de nuestro serial El renacer del Rock Progresivo español. Hablamos de Toundra, que tras su aplaudidísimo tercer trabajo de estudio, III, publicado en septiembre de 2012, han abierto este 2015 con IV, su primer LP de la mano de Superball/Century Media tras abandonar Aloud Music el pasado 2013.
Tras prácticamente un año de esfuerzo y duro trabajo, éste se plasma en un nuevo disco que sigue la línea de calidad de los anteriores con ese post-rock instrumental fino y elegante a le vez que enérgico y delicado por momentos. En ningún caso se ha perdido la bien definida línea estilística que da carácter y define al grupo, algo que, por otra parte, podría esconder cierta lógica tras la salida de Víctor García-Tapia (miembro fundador) en 2013 o el cambio de sello algunas fechas después. Esto acredita que para Toundra las ideas están claras, saben lo que quieren, conocen bien lo que hacen y no hay por qué cambiarlo si funciona.
Tras prácticamente un año de esfuerzo y duro trabajo, éste se plasma en un nuevo disco que sigue la línea de calidad de los anteriores con ese post-rock instrumental fino y elegante a le vez que enérgico y delicado por momentos. En ningún caso se ha perdido la bien definida línea estilística que da carácter y define al grupo, algo que, por otra parte, podría esconder cierta lógica tras la salida de Víctor García-Tapia (miembro fundador) en 2013 o el cambio de sello algunas fechas después. Esto acredita que para Toundra las ideas están claras, saben lo que quieren, conocen bien lo que hacen y no hay por qué cambiarlo si funciona.